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PALABRAS EN CEREMONIA DE LA UNIVERSIDAD MILITAR NUEVA GRANADA 

Tuve el Honor de dirigir algunas palabras durante la ceremonia de entrega de las batas blancas a un grupo de estudiantes de la Universidad militar. Hablamos de la Humanidad del Ser medico en esta época de crisis 

Buenas tardes.

Me ha confiado la Universidad el honor de dirigirles unas palabras el día de hoy…  Pero también es una responsabilidad enorme porque mis palabras deberán conmoverlos este año. Van a llevar formalmente una blusa blanca, quizás para algunos sea eso nada más, un paso en la formación y listo… pero confío en que mis palabras en verdad les hagan ver la trascendencia del momento.

En mi época no existía esta ceremonia, pero éramos la primera promoción y todo era nuevo así que las emociones eran a diario y llegar a ser médicos era algo espectacular…

Pero hoy cuando juntos hemos recorrido los pueblos de nuestro pais, hemos visto un tipo de médico que jamás queremos nosotros como universidad que Ustedes imiten. Tenemos ese reto y esa responsabilidad como Universidad y como profesores… en eso estamos… no importa que sistema de salud nos rija en cada momento…

El ser médico debe estar por encima de eso, porque repito, sin importar el sistema, deberemos atender a cada paciente como quisiéramos ser atendidos nosotros mismos y nuestros familiares… no lo olviden…

Nuestro objetivo hoy en esta ceremonia donde el blanco es protagonista, es que el corazón de cada uno jamás se contamine de la tentación de atenderle a un paciente solo un síntoma a la vez, por la razón que sea, como se quejan muchos de ellos hoy,  pareciera estar de moda, dizque por falta de tiempo…

Una recién egresada que está haciendo su año rural en Fusagasugá nos demostró la importancia de la integralidad que esperamos de ustedes… tuvo una paciente que consultó por hipertensión, pero recordó que por la edad habia que palparle sus senos… lo hizo y le encontró un cáncer de Seno temprano…

Hoy escuchamos con frecuencia otra queja de pacientes que exclaman, “el médico no me examinó” en parte es culpa de nosotros como profesores que no les enseñamos a veces a mercadearse y publicitar sus acciones.

Por ejemplo, usen siempre su fonendoscopio, pero luego díganle al paciente que su corazón y pulmones están bien. Uds. lo han visto… el paciente sale y exclama, es la primera vez que me examinan el corazón y me dicen que está bien… cual es la lección? Enseñen siempre, expliquen, motiven a cada paciente con su enfermedad, formular un acetaminofén es una ciencia hacerlo de tal manera que ustedes se diferencien del curandero, del vendedor de la farmacia o del papelito dentro de la caja que dice la dosis y las contraindicaciones. Para eso no se necesitan 6 años de medicina. Sus mamás saben formularlo.

 ¿Cual es la diferencia con un médico? ¿Con ustedes? El poder que ese acetaminofén cure o se convierta simplemente en una formula vacía. ¿Como hacerlo? Con el corazón, con el conocimiento que tienen para que ese analgésico tenga un valor más allá que el mismo formulado por otras personas que no son médicos. Enséñenle porque lo usarán y la mayoría de las veces es suficiente

Un paciente que consulta por un jarabe para la tos cada 8 días, de pronto lo que quiere no es el jarabe, sino que le expliquen su radiografía y le digan que no es un cáncer. Me pasa con las mamografías…cuando le explico a una mujer su radiografía , me emociona verla comprender que es lo que ve en esa placa blanco y negro que le entregaron y que miraba con susto.

No subestimen la capacidad de comprensión de los pacientes por humildes que sean… Esa es la magia del ser medico… convencer, educar y no olvidar los 4 principios del actuar médico.

Prevenir la enfermedad y eso durante su año rural seguramente los motivará a comprometerse con sembrar árboles, educar en un colegio, enseñar economía verde, prevención del cáncer, vacunar, enseñar estilos de vida saludable entre muchas cosas que por ser ustedes médicos serán aceptadas mejor por las personas sencillas. 

Curar algunas veces y no deberán frustrarse por eso, no siempre podremos curar y así su corazón los motive nunca prometan a ningún paciente que los curarán, Comprométanse con hacer todo lo necesario por su paciente y su enfermedad aceptando con humildad que cuando no tengan experiencia en algo se apoyarán en quien la tenga. Estoy muy seguro, porque lo he vivido, que los familiares y el paciente agradecerán más esa honestidad y ustedes actuarán con más tranquilidad. No lo engañen nunca, no es su derecho hacerlo.

Pero que pasará cuando no puedan curar, tienen la responsabilidad de aliviar el dolor. Hoy no hay disculpa para que alguien sufra dolor. No duden en combatirlo, el dolor deprime, empeora la actitud de un paciente hacia su enfermedad.

¿Y que pasa cuando no podemos prevenir, no podemos curar y controlado el dolor no tenemos nada más que ofrecer?

Pues debemos consolar el espíritu, una mano en la frente, un rato para escuchar el paciente, una sonrisa, un llanto compartido, somos la última línea de consuelo de un paciente que ha confiado en nosotros.

Recuerdo la época de más violencia de nuestro pais, cuando llegaban los heridos a diario en helicópteros a nuestro hospital. después de un viaje estresante, con una sensación de estar muriéndose, la mejor actitud al bajarlos de la nave era ponerles una mano en la frente y decirles , “SOLDADO SOY EL Dr CASTILLA Y USTED HA LLEGADO AL MEJOR HOSPITAL DE TRAUMA DE ESTE PAIS, AQUÍ HAREMOS TODO LO NECESARIO POR USTED…” y eso le daba tranquilidad...

Nunca alcanzaremos a tener todo el conocimiento en nuestras manos, pero debemos saber dónde buscarlo cuando  no lo tengan y espero que no sea SIEMPRE en inteligencia artificial, porque la sabiduría en la medicina no es solo el conocimiento , es la actitud, por eso a veces un curandero o una partera nos supera… simplemente por la actitud…

 DESDE HOY, ESTUDIEN, PROFUNDICEN SU CONOCIMIENTO, PERO MANTENGAN LA HUMILDAD PARA BUSCAR A SUS PROFESORES, porque nuestra  EXPERIENCIA transmite esa actitud que supera al conocimiento.

A partir de hoy busquen que no los elijamos  por sus conocimientos únicamente, sino que los elijamos por su actitud frente a los pacientes, POR SU actitud de servicio, el compañerismo, el colegaje. Como enseñamos en las prácticas de manejo de desastres… no nos importa el que llegue primero, nos importa más el que se devolvió por un compañero retrasado…

A partir de hoy tienen la responsabilidad de enseñar … a los pacientes, a la comunidad, a su compañeros y sobre todo a quienes vienen detrás de ustedes. Es la mejor manera de aprender…enseñando

Por último queremos que lleven un enseñanza a diario… hoy se habla de humanizar y se dan discursos en tal sentido y existen especializaciones en el tema. Pero mi experiencia me ha enseñado que la mejor manera de hacerlo es con el ejemplo, dejando el EGO para hablar siempre de nosotros…

SI alguno de ustedes mañana es el jefe de un departamento medico y está pasando revista y ve una auxiliar de enfermería con dificultades en una curación, ordene a su equipo que siga pasando revista y sin rasgarse “las vestiduras” para que lo vean, pida unos guantes y Ayúdele.

Seguramente la enfermera le dirá…”no doctor, que pena no se preocupe…” Termine de ponerse los guantes y ayude. Luego dé las gracias por haber podido ayudarle antes de que ella se las dé a ustedes. AL día siguiente sus pupilos copiarán su ejemplo y tendrán un servicio humanizado simplemente porque todos serán un equipo.

Sean maestros que con el ejemplo inspiren… el fracaso de un estudiante es el reflejo de nosotros, sus maestros

Humanicen y enseñen con el ejemplo…

Sean auténticos y ante todo recuerden que la muerte es una sola y la vida es todos los días… así que ser felices haciendo lo que hacen, debe ser una consigna diaria para ustedes.

Cuando sientan que no lo son, pregúntense por qué y si no lo saben busquen apoyo… porque estar bien con ustedes es mismos es la mejor garantía que tienen los pacientes de ser bien atendidos, porque notarán su alegría, su actitud y su entusiasmo. Tómense el tiempo para entrar en ese camino que llaman “ser felices”, porque no es una meta es una actitud para todos los días.

Podrán equivocarse hoy o no saber algo, pero aceptarlo les dará la sabiduría para aprender y evitar el máximo de errores cuando tengan la responsabilidad directa sobre sus pacientes.

Cuestionen con respeto a sus profesores, pregunten para que les sirve aprender esto o aquello y sobretodo pregunten que deben saber de sobremanera para enfrentar una vida médica con dificultades, porque estamos en Colombia y aún este pais necesita médicos toderos, médicos que resuelvan situaciones con el conocimiento, la actitud y el corazón…

Sean la solución a los problemas y no quienes lloran porque alguien se los solucione.

Si una sola de mis palabras a nombre de nuestra Universidad los conmovieron, entonces están listos para llevar sus blusas con orgullo para Ustedes, sus familias, sus profesores y sobre todo para nuestra Universidad, porque no olviden que esa blusa llevará siempre nuestro escudo… Gracias.

Ignacio Castilla Stipcianos